si... así es como lo perfecto, lo blanco, la muerte, la pureza, incluso el martirio, aunque no tan limpio y sereno como el óbito, sale de la misma lata de aluminio: es un arte sublime sostener el martirio entre las manos -sin ojos azules tras gafas de sol, sin luces de estrobos ni voz carminal- claro, es difícil caminar sin camino y también es difícil seguir a un insecto volador, pero es muy fácil vivir de hormas y moldes, y en algunos países tener un estilo no tiene perdón.
